Se llaman Flores de Bach a la serie de 38 Esencias Naturales extraídas de Flores silvestres de la región de Gales, en Gran Bretaña, cuyas propiedades curativas fueron descubiertas por el médico galés Edward Bach entra los años 1923 y 1934.

El Dr. Bach definió la enfermedad como un desequilibrio emocional que se produce en el campo energético de los seres vivos, si dicho desequilibrio continúa por cierto tiempo sin tratamiento, se produce la enfermedad en el cuerpo físico, citando sus palabras “la enfermedad es una suerte de consolidación de una actitud mental, solo es necesario tratar la actitud mental y la enfermedad desaparecerá”.

Partiendo de ésta base, interrelacionó la frecuencia “vibratoria” de determinadas plantas y flores con el carácter de sus pacientes, de ésta manera observó que la enfermedad no sólo es el resultado de trastornos corporales, sino que tiene su origen en sentimientos y posicionamientos negativos que bloquean nuestra energía vital.

Desde entonces, y siguiendo sus pautas, se han seguido investigando distintas flores, dando como resultado nuevos sistemas como Fes California, Bush Australia, Mediterráneo, Atlántida Canarias, etc., que permiten llegar más a fondo en los conflictos humanos.

Independientemente del tratamiento o terapia que se esté utilizando, las Esencias Florales aceleran siempre el proceso de curación, no provocan efectos secundarios o interacciones con otros medicamentos, están indicadas a cualquier edad y como tratamiento paliativo de cualquier dolencia.

Muy útiles en estados depresivos, insomnio, nerviosismo, fobias, estrés, ansiedad, angustia, miedos, falta de autoestima, trastornos de la menopausia, crisis de pareja, niños con problemas escolares, ancianos, etc. También son útiles en animales y plantas.

Las Esencias Florales, conectan con nuestras emociones, haciéndonos conscientes de nuestro ego, que en definitiva siempre es el responsable de ellas, armonizándolas. Pero las Esencias no trabajan sólo los campos mentales, van mucho más allá, son energéticas y sutiles pudiendo de ésta forma traspasar también nuestros campos sutiles y energéticos. En definitiva, son como digo yo, “pequeñas gotas de conciencia” que nos brinda la naturaleza para nuestra propia sanación.

LAS FLORES DE BACH ESTÁN RECONOCIDAS
Y RECOMENDADAS POR LA O.M.S
(Organización Mundial de la Salud) DESDE EL AÑO 1.983

Terapeuta:

Montserrat León

Naturòpata i Tècnica en Herboristeriai Dietètica pel Gremi d’Herbolaris de Barcelona (2002-2005). Terapeuta Floral en Flors de Califòrnia, Aula del Terapeuta (2005-2006).
Formació complementària:
Reiki II Nivel
Terapeuta de Sueños
Estudio de la Carta Astral con Flores de Bach.